Nadie apuesta en el fútbol argentino

Increiblemente el negocio de las apuestas deportivas todavía no prospera en la Argentina. Sin embargo el fútbol argentino proporciona una información muy valiosas a las casas de apuestas europeas, o bien con oficinas en Europa. Nunca se sabe quien está detrás de esas cosas con exactitud. No es lo que me importa ahora.

Periodistas y estudiantes de periodismo deportivo tienen como una fuente de ingreso estable la venta de información que rodea a cada uno de los partidos de la fecha, aún cuando se trate de cuestiones triviales.

Las apuestas deportivas online se producen hasta poco antes de comenzar cada partido y a los apostadores les interesa hasta el detalle más insignificante de cada encuentro: posiciones en la tabla de los equipos que se enfrentan, actualidad de sus jugadores, si ese día llueve, si el plantel está en conflicto, si hay viento o no, si el micro cuando iban al estadio se rompió y otros datos.

No soy de apostar, pero sé que un apostador precisa reducir las variables lo máximo que se pueda. Hay una creencia de que el exceso de información permite una mejor decisión. Y en algo donde el azar participa activamente, cuanta más información, menos margen para el pálpito y la decisión intuitiva.

Como sea, las apuestas demandan información del fútbol argentino y nuestro fútbol carece de un sistema de apuestas que lo contenga, le ofrezca nuevos recursos y esté a tono con la dinámica que tiene el deporte en el mundo.

El fútbol argentino se maneja con el concepto de un nicho. El voleibol es un nicho. El fútbol es un mercado gigante, deprimido a propósito, para no dejar ingresar a nuevos jugadores. Apuesto a que es así.